Desde el mas pequeño trozo de roca, al águila majestuosa; desde el mas pequeño insecto al anciano mas sabio, todos ellos cumplen un rol en su camino; hacen su camino viviendolo con alegría y satisfacción; sabiendo quienes son y aceptándose como son.
Honran y agradecen el honor que el Espíritu les hizo al crearlos. Aceptan tanto sus dones para servir a la creación, como sus aparentes defectos para servirse a uno mismo al darse la oportunidad de superarlos y transformarlos.
Solo en la mente y el corazón ignorante del hombre común, se hace un " culto del inconformismo con el propio ser, un culto del competir con otro ser":_ ¿ A quién quieres mas, a el o a mi?_ , cuando en realidad cada ser es irrepetible e irreemplazable.
Cuando aceptamos con alegría el lugar que tenemos en la vida, el responder al llamado del espíritu a vivir esta hermosa realidad; disfrutamos siendo nosotros mismos. Así nos completamos y nuestro ser resplandece pues caminamos en la belleza, al son del tambor sel corazón.
A veces eres un hijo, otras una abuela, un artista, un amante, un amigo, un tirano o un curandero; seas lo que seas, si a cada momento eres feliz y sirves en tu ser y accionar, el Espíritu sonríe en tu corazón y el mundo gira mas liviano, mas bello; para ti , por ti y tus hermanos.
Aho Metak Oyasin.
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